Por algún motivo que los propios responsables no comprenden Coton Crema aprovecha su programa sobre leer para celebrar una catarsis de odio y rencor. Vilamatas, Platón, Sánchez Dragó, Tolkien, de aquí no sale vivo nadie. Ni siquiera la propia escritura, de la que también tenemos mierda que soltar. Como contrapeso constructivo, aprendemos que Gadamer era mucho más que el malo de los pitufos. ¡Agárrense que vienen curvas!