Sonidos graves, pesados, como ecos lejanos que llaman a la guerra, nos acompañan esta noche, de la mano del camarada Sergio. Eso llamado Martial Industrial podría ser la banda sonora ideal para los tiempos convulsos que vivimos, melodías que incitan a la revuelta y a prenderle fuego a todo.
No os asustéis, nada hay que temer por nosotros, porque seguimos alineados en la misma barricada, listos para apuñalar por la espalda, entre otros, al que nos señale con el dedo.
¡Rompan filas y rechazen (...)