Las fechas se van sucediendo en los calendarios, que se acumulan en torres de papeles viejos que se dirigen al contenedor, que será quemado por algún benevolente higienizador social. Ayer, alguien cayó muerto. Otras cosas cayeron en otro lugar. Fracasos y desilusiones nos rodean en el día a día, y los contenedores están ya cerca del desbordamiento. Solo los elegidos ven una solución rápida y eficaz contra la acumulación de información: hemos de reciclar la realidad en ceniza. Los cambios físicos no (...)